viernes, 17 de diciembre de 2010
Al despertar...
jueves, 2 de diciembre de 2010
Tulipán de mar
Tulipán de mar
John Fisher era un marinero de unos treinta y tantos. Se había pasado la mayor parte de su vida yendo y viniendo, atracando en la mayoría de puertos conocidos de Europa. Era el cocinero de un barco que transportaba tulipanes de Holanda a prácticamente todo el mundo. Al llegar a Amsterdam debían hacer una parada técnica para repostar, descargar la mercancía y recibir nueva para dirigirse más tarde a otro lugar.
Después de preparar la comida para sus compañeros, decidió salir y conocer la vida diurna de esta ciudad. La nocturna ya la conocía. Comenzó a recorrer las calles parándose en algunos escaparates que le llamaban la atención. Al cruzar uno de los canales y llegar al mercado de las flores, no dudo en parar a mirar las variedades que allí había. Se quedó asombrado de la variedad floral de un puesto en concreto. La dependienta, alta, rubia y con ojos claros se quedó mirándole mientras acaba de recoger porque su turno había acabado. John cogió un tulipán y lo pagó. Acto seguido se lo regalo a la vendedora que instantaneamente se sonrojó.
Aquella tarde pasearon recorriendo la ciudad. Cerca de la plaza Damn ella entró en una tienda de ropa. Eligió una camisa a cuadros y obligó al marinero a que se la probase. Su primer beso fue mientras ella le abrochaba los botones de la camisa. Bonito romance -pensó el señor Fisher- con triste fecha de caducidad. Como si el tiempo no le importase intentó disfrutar al máximo aquel momento mágico.
A la mañana siguiente, el barco tenía que zarpar, y a él no le quedaba más remedio que hacerse a la idea que posiblemente tardaría meses en volver a aquella floristería. Mientras el barco salía del puerto, John Fisher apoyado en la barandilla miraba incesante el astillero esperando una despedida. Aún sentía el olor a ella en su camisa a cuadros. Cerró los ojos y dejó que la brisa marina se mezclase con aquel aroma...
sábado, 13 de noviembre de 2010
En treinta minutos...
martes, 26 de octubre de 2010
Palabras
domingo, 24 de octubre de 2010
Ni libre ni ocupado
viernes, 22 de octubre de 2010
Lo pienso y lo escribo.
miércoles, 29 de septiembre de 2010
Lost in translation
lunes, 27 de septiembre de 2010
Los besos y los abrazos los dejamos para más tarde.
Cuando entró en su antigua clase misteriosamente todos los alumnos se quedaron en silencio. Era tal el respeto y la devoción que tenian por ella que no tenian palabras para decir lo que sentían. Ella dijo hola y los niños contestaron como en un anuncio de Ausonia. Una niña que no pudo aguantar la tensión se levantó, y se lanzó sobre ella. Entonces rompió a llorar. Automaticamente, el resto hizo lo mismo y la escena se trasformaba en una alegría nostálgica por la maestra que los había marcado y que ya no podía estar con ellos, aunque ese fuese su mayor deseo.
viernes, 24 de septiembre de 2010
No te pensaba invitar.
Sé directo, me dijo un amigo cuando ya estaba cansado de buscar al amor de mi vida. No te andes con rodeos, me dijo cuando intentaba buscar la conversación y la amistad en ellas. Y sobretodo, diles las cosas directamente cuando las pienses.
Y eso he hecho. Y de momento no funciona mal el sistema. En mi nueva escuela doy mi opinión como el que más y además no me callo nada. Basta ya de estar en la sombra de una escuela que propone cosas sin sentido. Por fin soy yo el que propone la cosas. Y va y resulta que además tengo gente que me sigue y acompaña en mis ideas.
Hoy, a las dos, yendo de camino al café del jueves (es el único descanso que tengo en todo el día), ibamos unos cuantos commpañeros de camino a la cafetería que se encuentra a escasos dos cientos metros de la escuela. De pronto me he encontrado con la maestra de inglés. Mientras el resto continuaba su camino hacia la cafeína, he pensado por segundos que queria conocerla y le he dicho:
- Vols vindre a fer un cafè, Anna?- mientras el resto se alejaba.
- No. Merci, en un altre moment!- Contesta ella muy simpática.
- ¡Tranquil·la! Que no pensava convidar-te- Le he contestado sin pensar.
Raúl me ha mirado con mala cara pensando en la frase que le había dicho. En cómo había contestado así a una compañera que ni siquiera conocía. Hemos continuado hacia "el Garrofer" y hemos tomado el dichoso café sin darle más vueltas en si lo que le he dicho le ha sentado mal o bien.
Por la tarde, y después de cuatro horas de clase los niños estaban insoportables. He sacado lo que quedaba dentro de mi y ha sido más o menos soportable. A las cinco, cuando la escuela ya estaba casi vacia, Lluis y yo nos hemos coordinado, llevamos dos semanas sin hacerlo. Y más tarde ha llegado el momento de salir y dejar la escuela después de diez intensas horas de trabajo. Me he acercado a la sala de maestros (acabo de recordar que es el segundo dia consecutivo que me dejo el tupper dentro de la nevera) y allí estaba Anna. Aún trabajaba haciendo fichas de inglés.
- Encara continues aquí? Què no te canses?
- No em queda un altra. És "lo" dolent de tenir un terç de jornada.
- I ara què fas?- le pregunto mientras miro una tela de araña que estaba pintando para hacer un mural con vocabulario anglosajón.
- Estic fent un mural, però, no m'ha quedat massa bé.
- Doncs la pròxima vegada deixa'm que t'ajudi.
- No. No cal, gràcies. Tot hi que m'han dit que aquestes coses se et donen molt bé.
- Per això mateix t'ho dic. Però ja vec que la teva dinàmica és dir-me a tot que no avui.
Entonces empezó a reirse y la dejé con su sonrisa para salir de la escuela. De camino a casa, hice una pequeña parada para hacer una encuadernación. Al salir, volviendo a hacia mi humilde morada veo como ella va caminando dirección la parada del autobús. De repente, cambia de dirección y entra en un bar. Mi primer pensamiento es que seguramente había quedado con alguien. De pronto, cambio mi itinerario y me acerco hasta el bar. Miro por la puerta y veo que está sola. Entro.
- Què fas aquí? Dona la sensació com si t'estiguès perseguint avui!
- Estoy esperando el autobús. Voy a Barcelona- contesta en perfecto castellano.
- ¿Quieres compañia hasta que venga?- le digo esperando de nuevo una negativa suya.
- Sí, claro- contesta de nuevo con la sonrisa de la sala de maestros.
Después de media hora de conversación en la que nos hemos conocido un poco más, volvió a decir que no. No quiso que le pagara el café, y con una sonrisa, se levantó, pago ella y dijo:
- El próximo jueves a las dos. Pagas tú.
jueves, 16 de septiembre de 2010
Vivo más de noche que de día...
Aparentemente todo es normal, un año más que lo dedicamos a ir a nuestro querido pueblo a bajar a la Abuela Santa Ana. Como siempre hacemos el recorrido típico, fijado y planeado desde hace años. Quedo con mi madre a eso de las ocho y media, me ducho, me visto (hago uso de mis mejores galas para la ocasión), y bajamos juntos hacia la plaza del ayuntamiento donde oiremos el pregón de cada año y nombrarán a la nueva reina de las fiestas.
A continuación, subimos hacia la ermita para ver el castillo de fuegos artificiales. Es curioso, porque durante el trayecto, año tras año ves a la misma gente. Un poco más mayor. Un poco más madura. Al llegar a la esquina de siempre te busco con la mirada y te encuentro. Es increible pensar que sólo vea a una vieja amiga en el mismo lugar cada año. Nos saludamos y bromeamos porque los dos nos buscamos al llegar a ese lugar. Y reimos porque parece que hemos instaurado entre nosotros esa ley que dice que solo nos podemos ver unos minutos al año. Me dices que te casas y yo te digo que sigo soltero. No pasa nada, la vida continua y mientrastanto vemos como los cohetes despegan del suelo para estrellarse contra el cielo. Al acabarse la traca que pone punto final a la pirotecnia nos despedimos hasta el año que viene. Sabemos que así será.
Mi madre me vuelve a coger de la mano (no me gusta que lo haga, pero se lo consiento, es una vez al año), y subimos para ver bajar a nuestra abuela Santa Ana. Aún me sigue sorprendiendo, que en la bajada haya gente que se descalce y haga penitencia. Que aún quede gente creyente, aunque personalmente creo que lo hacen más porque la gente crea que así lo es. Acabamos el recorrido y como marca la tradición cenamos y luego mi calle se llena de coches preparados para el botellón.
Entre "gelipolas" y "toballa" nos reunimos. Bebemos para saciar la sed y algunos para perder la vergüenza. Este año hay algo diferente. El número de nuestro grupo ha aumentado considerablemente y no porque hayamos invitado a más forasteros por nuestra parte. Es un grupo de chicas. Increible, inmejorable. Cada una con sus particularidades que aquí no comentaré. Gracias a ellas, hemos vivido y sentido las fiestas como siempre lo habiamos deseado. Así que este post va para vosotras.
Deseo que esto solo sea el principio de una gran amistad. Deseo que ni el amor, ni el odio separe esto y que de nuevo el próximo 24 de agosto pasemos unas grandes fiestas entre "Mucans" y "SDLN's".
También va dedicado a ti Angelita. Que seas feliz en tu nueva vida.
miércoles, 15 de septiembre de 2010
He vuelto!
jueves, 2 de septiembre de 2010
Hijo, en lo que sea... pero el mejor.
"Si tu padre pudiese verte se sentiría orgulloso."
sábado, 7 de agosto de 2010
10 minuts d'insomni
Tu no saps que ha passat aquesta nit. Es possible que no siguis conscient. Però la realitat és que he marxat amb la sensació de la pèrdua d'una amiga, d'una companya, d'un pilar.
Sempre ho veies tot negatiu i la veritat és que jo no sempre ho veig tot positiu. M'encata veure les coses negatives i intentar posar-les en positiu. Aquest és el Secret. El meu secret.
No saps quant et trobaré a faltar.
Ets l'única persona que podia saber que em passava alguna cosa només amb la mirada. Ets la que sempre em tornava el somriure que jo sempre envio.
Espero que tot et vagi molt bé, que et vagi fantàstic i que siguis molt feliç. Perquè sé que jo no hi seré al teu costat per viure-lo.
Són dos quarts de quatre i em sento buit per dins. No puc dormir i continuo escrivint.
Et faig una perduda i sé que no trobaré resposta.
viernes, 6 de agosto de 2010
Lo veo y subo
Día a día, noche a noche, nos juntábamos en la mesa 203 para disfrutar del vaivén de las fichas e intentar en una unión malévola desbancar a nuestros oponentes.
Apenas había visto una foto tuya, un nick y tu ciudad. Lo siguiente fue cotillear tu facebook. Ya sabía algo más de ti. Me decías que trabajabas en un restaurante, que tus horarios eran raros y que estabas cansada.
Así fue lo nuestro. Sólo letras, sólo cartas. Y cuando se acabo el Poker, se acabo la relación.
Meses más tarde y después de un control exhaustivo de la guardia civil en el aeropuerto para acceder al embarque del avión que me llevaría a Tenerife, mi madre dice de comprar agua antes de subir al avión. Mientras ella se dirige a pagar, veo como tú estás en la caja cobrando. Me hago el despistado y miro en otra dirección. Es mi primera y mas primitiva reacción. Pero por el rabillo del ojo veo como me reconoces. Cuando mi madre se decide a acercarse a ti y pagar te vas. Pones la excusa que tienes que entrar dentro y tu compañera te substituye para cobrarnos.
Después de pagar casi 6 euros por dos botellas de agua de medio litro nos sentamos en una mesa cercana a la caja. Tú vuelves justo un cliente después que nosotros. Mi madre no se percata de lo que pasa, mientras yo sonrío sin poder evitar pensar en aquellas partidas de Poker que jugabamos en Internet.
Ahora ya se más de ti. Trabajas en el aeropuerto y no me quieres conocer. Porque en la red no existe el físico. Son sólo palabras. Es algo así a como cuando lees un libro y te imaginas e idealizas al personaje principal de la historia. Y así tiene que ser.
Vacaciones
Por eso, hoy he cogido mi libreta de historias y dejaré escritas dos que llevaba tiempo en cola y que aún no había publicado...
martes, 20 de julio de 2010
El sueño de una noche de verano
- Sí, creo que sí- respondió con una leve sonrisa.
- Pues es una pena- Dije yo, mirándola de arriba abajo.
Seguramente se había pasado dos horas delante del espejo eligiendo el modelito para la ocasión. Ahora entiendo el tamaño de la maleta de cuando llegó al hotel. No era muy guapa, pero había sabido combinar a la perfección sus labios con su vestido. Además, la raja de su falda hacia que quisiera saber que había un poco mas adentro cuando cruzaba la pierna en el taburete de la barra del bar.
Pidió una coca-cola y yo seguidamente lo mismo acompañado de mi clásico Cacique. Mi madre también esperaba con su poleo en uno de esos sillones narcolépticos. Cuando ella recibió su bebida y yo la mía le dije:
- Cuando mi madre se vaya a la cama, yo te esperaré en el hall hasta las doce y cuarto.
Seguidamente me levanté y me dirigí a la mesa donde estaba mi madre. En seguida se cansó y se fue a dormir. Yo me excusé y le dije que permanecería un poco más en aquel bar escuchando jazz. Mientras tanto, ella hacía rato que se había marchado con sus padres posiblemente a la habitación.
A las doce y cinco minutos salí hacia el hall porque no estaba bien hacer esperar a una señorita. Aquella entrada disponía de una fuente central y de sillones a su alrededor. Me senté en uno de ellos. Desde allí buscaba un reloj próximo y lo comparaba con el mio por si hubiera estado retrasado. (Ya se sabe, una hora menos en Canarias.)
A las doce y dieciocho minutos mi ilusión se desvaneció, me levanté y salí del hotel.
- Como mínimo lo has intentado- Me decía en voz alta desde la puerta del hotel.
- Y al final lo has conseguido- Me dijo una voz susurrándome al oído y acabando en una risa cómplice.
Cuando me giré para ver de dónde provenía esa voz, a mis espaldas estaba ella.
Paseamos por la playa mirando los puestos de caricaturas, bolsos, colonias y souvenirs. Nos tomamos la segunda copa en un pub de música salsa. Ella me sacó a bailar. Mejor dicho, me enseñó a bailar algo. Salimos de allí, bajamos hasta la playa mas cercana y caminamos por la arena hasta que ella decidió sentarse y empezó a mirar la luna, que aquella noche se reflejaba sobre el mar.
- Bueno... ¿Cómo te llamas?- Me preguntó mientras hundía sus pies en la arena negra de Puerto de la Cruz.
- Soy Juan. ¿Y tú?- Le dije sentándome a su lado.
- La luna esta preciosa esta noche- Contestó evitando mi pregunta y acercándose un poquito más hacia mí.
- Como tú- Le dije mientras la miraba a los ojos.
Noté como nos acercábamos poco a poco, y como ella dejaba de mirarme por un instante para mirar mis labios. Entonces miré los suyos y nos besamos...
De lo que pasó después no escribiré nada, porque no necesitaba nada más. No necesitaba un nombre, ni un lugar, ni una razón, pues esto no es más que el sueño de una noche de verano.
domingo, 4 de julio de 2010
Cel i estrelles
Per fi pau, vaig pensar. Assegut en un banc mirava l'horitzó. No és la primera vegada que ho faig, però aquest horitzó no és al que estic acostumat. No és una línia horitzontal de color blau fosc baix i blau clar dalt. Si no un immens bosc que dibuixa un final visual a base de paràboles.
Aixequem el cap i mirem cap a dalt. Era la nit més curta de l'any. Encara quedava llum a l'oest. Però a l'est es començaven a veure les primeres estrelles. Una brillava amb més força, deies tu. No era una estrella, si no Mart, que en aquesta estació de l'any es pot veure a simple vista.
- Haurà vida en altres planetes?- Em preguntaves mentres miràvem el cel.
- Crec que sí.- Vaig contestar. - Dels milions d'estrelles que hi ha al firmament segur que hi ha una que contingui un planeta el més semblant al nostre. Ha d'haver un com el nostre. Però això no vol dir que alguna vegada ens poguem comunicar amb ell. Ho veig impossible.
............
Busco un final i no ho trobo. Per què li busco a tot un final, una resposta? Dec ser molt rar. Sí, sóc molt rar. Pot ser necessite una rara que entengui les meves rareses. Tal volta, en aquell altre planeta hagi un rar com jo, amb una rara i que dins de les seves rareses siguin perfectament compatibles i puguin estar units. És possible que en les relacions també estigui buscant sempre un final. I quin deu ser el final? La resposta possiblement sigui, passar la resta dels meus dies amb aquella rara. Aquest seria el final perfecte.
.............
Ara sóc al llit, he apagat el llum. Miro el somier que tinc a sobre. La funda del matalàs està estripada i fico la meva mà dins d'ell com si busquès un tresor. Intento desxifrar els missatges que adolescents han escrit en les varilles de fusta. No sé que dir. No trobo la resposta a la teva pregunta. Tanco ells ulls, i intento viatjar a aquell planeta per si trobo a la rara que m'estime.
martes, 29 de junio de 2010
Perdida
Es raro cuando vas a la playa y realizas la actividad inversa a la mayoría. En vez de leer mientras tomas el sol, sacas tu libreta y empiezas a escribir. Es un buen lugar para encontrar la inspiración.
Cuando aún mis páginas estaban en blanco, por mi toalla empieza a deslizarse una pelota pequeña, de esas pelotas duras que cuando botan lo hacen con tanta fuerza que no sabes que dirección tomará. Ya se sabe, y lo dicen la mayoría de manuales de autoescuela que detrás de una pelota siempre hay un niño. En este caso era niña, no superaba el medio metro. Morena, muy morena, como si toda su vida transcurriera en las playas de Cambrils. Sus ojos azules como el mar y su pelo rubio, quemado por el sol y alborotado a causa de sus juegos en la arena.
Ella se acerca, coge la pelota y me mira. Esta extraviada, pues su cara y su ojos casi llorosos mirando el horizonte así lo indican. Va en busca de una madre que por alguna razón incomprensible la ha perdido de vista.
Por un momento me mira de nuevo. En mi no encuentra la respuesta a su búsqueda. Así que gira la mirada hacia atrás, vuelve a mirar hacia delante y continúa la marcha en dirección norte.
Minutos más tarde, vuelvo a toparme con la misma expresión en cara y ojos. De nuevo alguien que mira al horizonte. A ese horizonte al que estoy tan acostumbrado. El mismo moreno, el mismo rubio, los mismos ojos. Pero esta vez supera el metro y medio. La mujer se derrumba delante de mí. No consigue encontrar a su hija.
Cuando por fin consigue salir de su acongojo gira la mirada hacia mi toalla y le digo:
- ¿Tal vez has perdido a alguien?
- (Ella asiente con la cabeza).
y entonces respondo:
- Posiblemente este jugando en aquel castillo de arena.
Cuando por fin mira a lo lejos y consigue localizar a su hija, su cara pasa en cuestión de segundos de la tristeza, a la alegría y de la alegría, al enfado.
jueves, 17 de junio de 2010
Carta del mestre
Entre les matemàtiques, la plàstica, el medi, el castellà, el català, la informàtica i demés histories, heu après que a la paperera només va una persona. Que l’ordre dels factors no altera el producte. Que quan es diuen les coses, s’han de complir. Que quan tinc un zero al quocient, sempre baixo la xifra següent. Que Oscar sempre sap i sabrà com s’ha de tornar després de fer informàtica. Que a casa de Melania, i no t’enfadis que és broma, viuen en el món al revés. Que sempre s’agafa abans a un mentider que a un coix i que quan dic que és possible que això surti al control, ja sabeu que sortirà.
Ahir em van escriure una carta, deia que era un mestre que us deixava jugar i que explicava les coses molt bé. Que sempre estava dient dites, refranys i acudits i que tota la classe reia i aprenia alhora. Aquesta carta tenia una pregunta que a continuació contestaré, perquè ja sabeu, que tot el que pugui contestar ho faré. La pregunta deia que si me’n recordaré de vosaltres. I sí, i tant que me’n recordaré. No us podré oblidar mai perquè...
De vosaltres mai podré oblidar per exemple, els crits d’Emma, els cucs de seda de Yaiza, les bromes d’Antonio, l’obsessió pel Barça de... Jordi. La goma feta miques d’Ivan, la geometria de Victor, les postures de Javier a la cadira, els ulls d’Anais, els cargols de Sonia, els empipaments d’Andrea que sempre acaben en un somriure. La ment d’Anna, l’absència de Carla, els jocs de Javi, els Pokèmon de Jose Luis i els son Gokus d’Agustín. L’alegria de Sonia Ramirez, la delicadesa de Judith, la tranquil•litat d’Angelo i el fitxatge d’última hora del Dani. El cabell de Jeannette, el somriure de Sandra, la curiositat d’Abdel, el cor de Melania i de l’últim de la llista però no menys important, Oscar.
Gràcies per haver-me ensenyat tant. Gràcies per fer-me superar-me dia a dia. Perquè part del meu treball el feu vosaltres. Gràcies per haver-me fet millor mestre. I Gràcies per haver sigut els meus alumnes.
Us desitjo per al curs que ve un milió de somriures, la meitat d’excel•lents i un quart de motivació que us ajudi com a mi, a superar tot el que us proposeu.
El curs que ve no estaré amb vosaltres. Però m’heu demostrat que si voleu ho podeu fer tot molt bé. Desitjo que d’aquí uns anys ens trobem, vosaltres més grans, jo més vell, i em digueu. Què bé que m’ho vaig passar amb tu!
Per fi, i en veu ben alta puc dir que hem aconseguit ser el millor quart C. M’alegro infinitament d’haver format part de la vostra vida.
Us estimarà sempre. El vostre mestre.
jueves, 10 de junio de 2010
Cuando menos te lo esperas.
Subimos al coche y partimos hacia Tarragona como un fin de semana más. Durante el trayecto hablamos sobre lo acontecido el fin de semana. Él me cuenta cosas sobre la celebración de su cumpleaños. Yo por otro lado le hablo de la fiesta del viernes y del sábado.
La fiesta del sábado fue algo loca. Fui de aquí para allá. Una buena amiga con contactos nos llevaba arriba y abajo. Cogiendo taxis sin parar por Valencia, descubriendo lo que la noche valenciana nos deporta. Cada hora que pasaba nos ibamos encontrando con más personajes del inframundo, que alcoholizados, daban rienda suelta a sus deseos más oscuros. Entrada bien la mañana nos despedimos. Ella se va a su casa y yo evidentemente a la mia.
Fin de la historia.
Cuando nos quedamos ya sin conversación, Pedro sube la música. Oímos el último cd de Pignoise y Despistaos. A consecuencia del desgaste realizado el fin de semana poco a poco noto como mis ojos se cierran. Entro en plácido sueño. Repaso mentalmente el fin de semana. Sonrio en silencio. Todo esta tranquilo. Ha sido un fin de semana genial.
De repente, un golpe fuerte me despierta. Abro los ojos, y como si de una película se tratase veo como el coche esta sin control. Zigzaguea de izquierda a derecha, sin rumbo, esquivando los quitamiedos de la carretera. No hay tiempo para pensar. Sólo oigo el ruido del coche derrapando y veo como Pedro se desespera intentando dirigir la máquina descontrolada. Sólo espero recibir el golpe inevitable. Entonces, afortunadamente, el coche se para. Respiramos, nos miramos y le pregunto que ha sucedido. Hemos atropellado un jabalí.
Parados en la cuneta, solos y sin casi visibilidad pensamos qué hacer. Lo mejor, continuar la marcha hasta la estación de servicio. Una vez allí y con el coche inservible, empezamos a pensar en lo sucedido. En la suerte que hemos tenido de haber salido ilesos del accidente. En ese momento, es cuando piensas que la vida es así. Cuando menos te lo esperas te vas.
martes, 11 de mayo de 2010
Monòton...
Estàs al llit. Despertes. Està tot fosc, estires el braç cap a la dreta. Està fred. No saps ben bé on estàs. Quan has aconseguit despertar-te una mica, te n'adones que estàs a casa. Engegues el llum, mires el mòbil. Les set i mitja.
T'aixeques, te canvies, esmorzes i baixes cap al cotxe. No penses en res. Tens son. Puges al cotxe i un, dos , tres, cinquanta-tres quilòmetres i estàs a el Vendrell.
Un altre dia en que penses com t'ho faràs per aconseguir que els nens et facin més cas que el dia anterior. Que aprenguin més que el dia anterior. Que siguin una miqueta més persones que el dia anterior.
Després d'una dura lluita són les cinc. Esperes a la porta. Ella surt. De camí al cotxe xarrem i intento traurem l'estrès acumulat durant tot el dia.
Agafo el cotxe i un, dos, tres, cinquanta-tres quilòmetres i estic a Cambrils. Pujo a casa, bereno i estudio. Així és la vida d'aquest opositor...
..........
Un mes després, he aprovat.
Tinc la sensació d'haver pujat una muntanya. D'haver aconseguit el que tant desitjava. I es que si t'ho planteges, i t'esforces sempre tindràs una recompensa.
..........
Gràcies a tots els que d'alguna forma m'heu ajudat a superar aquesta monotonia. A sobreposar-me a totes les dificultats i tirar endavant.
martes, 27 de abril de 2010
Entre oposiones...
Así que hoy he ido con sueño a la escuela. Me he tomado un café a las 12 porque ya no podía aguantar mas. La tarde ha sido como siempre, sufrida. Y al salir, he decidido que lo mejor era ir al instituto y salir de dudas. Me he tomado el segundo café antes de coger el coche y me he teletransportado al Instituto de Horticultura de Reus.
Una vez allí, he subido las escaleras, y al llegar al segundo piso estaba ella. Una chica que conocía de vista de la cafetería de al lado de la escuela. La típica chica que ves, y que después de cruzártela días y días, acabas diciéndole, hola y adiós. El día del examen escrito ya la había visto porque esta en mi mismo tribunal.
Le lancé un hola, entre los nervios de antes de entrar. Y ella me dijo:
- ¿Te conozco?
- Sí, me conoces de El Vendrell- Le contesté yo.
Hoy me la vuelvo a encontrar, y hablamos de oposición y de cosas, y de más cosas. Entretanto, sale el tribunal y hago mis preguntas pertinentes. Suspiro. Mi sueño no se ha cumplido. Me toca leer mañana. Y como ella era la última del tribunal se queda, y de camino al coche seguimos hablando, y voy notando cierta conexión. A ella se le ve muy a gusto, pues no marcha. Después de casi un cuarto de hora de conversación y a punto de concluir la misma, le digo:
- Bueno... ¿Cómo te llamas?
- Andrea- contesta ella.
- Yo soy Juan. Espero que tengas mucha suerte con tu defensa.
Me giro, y me voy al coche. Después de cinco pasos y ver que mi cerebro por fin reacciona me giro para ver donde está ella. Va en dirección a su coche. Pienso... de nuevo se me escapa. Y entonces ella se gira, me mira, espera solo dos segundos y dice desde a lo lejos:
- ¡¡Que tengas tu también mucha suerte!!
- ¡Sí! ¡La tendré!¡Gracias!- pero qué coño haces Juan, pienso.
Me vuelvo a girar y voy hacia el coche. Entro , golpeo el volante enfurecido y pienso en por qué cojones no le he dicho de ir a tomar un café. Por un momento creo que ella lo estaba deseando. Me lamento porque es posible que no la vuelva a ver. Me lamento porque sería una coincidencia volverla a ver. Me lamento por no actuar a tiempo y por no actuar de corazón.
Arranco y salgo de allí. Ella viene detrás en su Leon plata. Sueño en un trayecto de 500m en el que ella pare en paralelo en la rotonda para yo poder bajar la ventanilla y decirle algo. Tener mi segunda oportunidad. Sin embargo, cuando llego a la rotonda y paro, miro por el retrovisor y veo desilusionado como coge el desvio anterior.
miércoles, 31 de marzo de 2010
Retorno al inicio...
- Mmmmmm...es posible...(no lo recuerdo).
- Tú me enseñaste a jugar a las canicas.
- Sí, jejejej. ¿Y aún juegas? (lo dudo, porque un niño de quinto debe de estar pensando en el juego de Play3 que se comprará esta Semana Santa)
- Me acuerdo que jugabas con nosotros a fútbol.
- Sí desde que ibas a primero... (Buufff, y estas en sexto. Y no jugaba, era tu arbitro.)
- ¡Hola Blanca! ¿Cómo estás?
- ¡Aún te acuerdas de mi nombre, Juan!
- Tú también del mio. ¿No?
- Madre mía cuanto tiempo. ¿No?
- Realmente no hace tanto. Lo que pasa es que tu vida corre más rápido en este momento, y la mía, está en PAUSE.
- Hicimos rugby contigo en educación física.
- Sí. (Aún estudiaba la carrera)
- ¡Madre mía! ¿Aún te acuerdas de mi nombre?
- Sí Elena, porque será...
- Tu nos leías el cuento de el flautista de Hamelín.
- ... (En mis dos peores semanas como maestro, en educación infantil)
- Me suenas de algo y no se de qué. ¡Es como si te conociera de toda la vida!
- ¡Anda! ¡Cómo te llamabas!
- Me llamo Juan.
- ¿Cómo no te acuerdas de él si nos dio clase en sexto cuando Mari Carmen estuvo enferma?
- ¿Eres famoso? ¿Sales en la tele o algo?
- Digamos que algo.
Estas son algunas de las conversaciones que he tenido hoy al volver a Escolapias. De nuevo, que bueno es ser maestro y poder disfrutar años después de esto. De un simple clip de Piolín, de un juego de canicas o de que piensen por un momento que les eres tan familiar que debe ser porque te han visto en la tele.
martes, 23 de marzo de 2010
Què bo és ser mestre!
Moltes vegades penso per què em vaig fer mestre.
Un bon amic un dia em va dir. No sóc mestre per les vacances, no sóc mestre per explicar coses que repeteixo dia a dia, any tras any. No sóc mestre perquè m'agradin els nens, ni per què cada dia és diferent. Sóc mestre perquè un dia, no se bé quan, em trobaré amb un exalumne/a, i aquell dia aquest alumne/a em dirà: Encara recordo, encara tinc a la memòria el dia que vas explicar el truc del DUC. (Memotècnica per aprendre quan es posen guionets alhora d'escriure els nombres)
Són aquestes coses les que et fan ser mestre. Ells creixeran, ells s'oblidaran de tu, però els hi hauras deixat una marca en la seva vida que de tant en tant els hi vindrà a la memòria. I aquell dia, quan et trobin, només recordaran coses positives de tu.
Avui, he rebut un mail d'una nena que harà tindrà 10 anys que encara estudia a l'escola en la que treballava l'any passat. S'ha enrecordat de mi i m'ha escrit un mail dient que el dijous marxava d'excursió a Montblanc. No calia res més. Amb això he tingut prou per a sentir que a aquesta nena l'he marcat d'una forma o una altra. I per això, sóc mestre.
Sóc mestre perquè un dia no fa molt estava a una discoteca, uns amics van dir d'acostar-nos a un grup de xiques que hi havia a prop. En acostar-nos em van saludar efusivament. Eren exalumnes, estaven encantades i em veiem com un pare per a elles. Ens vam fer fotos i em van demanar el meu mail.
Sóc mestre perquè unes falles estava veient falles, i ja se que és repetitiu. Em vaig trobar a una parella de nens, que ara ja no ho eren. Ara són parella i recordaven com si d'una grabació es tractés una classe de coneixement del medi que van tindre amb mi en la que els hi explicava la reproducció humana.
Sóc mestre perquè desitjo que dia a dia, mes a mes, anys darrera any em trobi amb exalumnes que hagin viscut, compartit moments amb mi. I que jo d'alguna forma, encara que petita, forme part de les seves vides.
A tots els meus exalumnes, gràcies per fer-me dia a dia millor mestre.
domingo, 28 de febrero de 2010
Chopin - Nocturne
Chopin va escapar el primer de novembre de l’alçament cap a Àustria. Molts dels seus familiars i amics es van quedar a Varsòvia en mig del caos. Com a polonès, Chopin volgué lluitar i es va sentir frustrat al no poder fer-ho. És difícil imaginar com podria haver escrit aquesta obra tan dolça barrejada amb aquests sentiments i emocions.
Aquesta composició sembla que evoca una imatge del cor de Chopin, pacífic i complit. Tal volta la raó va ser la relació que va establir amb Konstancja Gladkowaska, una dona a la que Chopin li tenia un afecte secret.
Konstancja va assistir a la mateixa escola de música de Chopin i la van preparar per a ser cantant. Chopin va ser incapaç de confessar el seu amo unr per ella i va passar quasi un any amb la sensació d’un amor no correspost. Van actuar junts en una peça musical de Rossini “La Donna del Lago” de gran èxit. La veu de Konstancja es barrejava amb el piano de Chopin i van omplir la sala de concerts. Hi havia bona connexió entre els dos, com un somni que no volien que acabés.
De Chopin es diu que és el poeta del piano. Tal vegada va ser perquè li era molt més fàcil expressar els seus sentiments a través del piano.
domingo, 14 de febrero de 2010
miércoles, 10 de febrero de 2010
lunes, 8 de febrero de 2010
miércoles, 3 de febrero de 2010
Imatges plàstiques...
domingo, 24 de enero de 2010
I don't care - Apocalyptica & Three Days Grace
jueves, 21 de enero de 2010
sábado, 16 de enero de 2010
CURRÍCULUM I ORGANITZACIÓ
sábado, 9 de enero de 2010
domingo, 3 de enero de 2010
sábado, 2 de enero de 2010
Snow Patrol - Chasing Cars
Para todas aquellas personas que les cuesta explicar lo que sienten y para todas aquellas que no se dejan llevar por el tráfico de los coches porque estan demasiado preocupados por su vida.